miércoles, 20 de septiembre de 2017

Sergio Maldonado no fue recibido por Otranto y dijo que el juez "no quiere que se sepa la verdad"

TRAS EL MEGAOPERATIVO EN LA COMUNIDAD MAPUCHE, ORDENADO EL LUNES POR OTRANTO, QUIEN NEGÓ EL INGRESO DE LA FAMILIA DURANTE EL RASTRILLAJE, AYER A LA MAÑANA EL HERMANO DE SANTIAGO SOLICITÓ UNA REUNIÓN QUE FUE RECHAZADA POR EL MAGISTRADO. "¿QUÉ PUEDO PRETENDER DE UN JUEZ QUE NO NOS RECIBE?", SE PREGUNTÓ SERGIO MALDONADO.

El hermano del joven desaparecido hace ya 51 días se presentó ayer a la mañana ante la puerta del juzgado federal de Esquel para pedirle explicaciones al juez Guido Otranto por el mega operativo ordenado el lunes en la comunidad mapuche Pu Lof en Resistencia de Cushamen.

“Ayer (por antes de ayer) allanó la comunidad y no nos avisó. Nos enteramos por la prensa, fuimos pero no nos dejó entrar. Hoy vine hasta su oficina para que nos diga qué fue lo que hizo ayer, todo ese despliegue para qué, pero no nos recibe”, se mostró indignado Sergio Maldonado.

Para Maldonado, “no hay nada que (el juez) esté haciendo” a su favor. En la puerta del juzgado de Esquel, el hermano de Santiago dejó entender que ahora evaluarán también solicitar la recusación del magistrado en la causa del hábeas corpus. Por la investigación de la desaparición forzada el juez ya fue recusado y la Cámara citó una audiencia para el próximo jueves. “Es el primero que no quiere que se sepa la verdad”, insistió Sergio, que “desconfía” de todas las medidas de prueba que está tomando el juez.

“Qué puedo pretender de un juez que no atiende a las víctimas, que somos los principales involucrados, pero tiene tiempo para salir a los medios y decir que mi hermano está ahogado”, remarcó Sergio Maldonado, que ironizó sobre la posibilidad de contactarse con el juez a través de los avisos clasificados de una revista local. “Le voy a mandar un mensaje a través de los clasificados preguntando dónde está mi hermano”, ironizó Maldonado.

A 50 días de la desaparición de Santiago, que según testigos fue capturado por los efectivos de la Gendarmería junto a la orilla del Río Chubut, el hermano sostuvo que todavía tiene la esperanza de encontrarlo con vida. “Lo último que me queda es la esperanza de que mi hermano esté con vida. Tengo que seguir buscándolo, la esperanza es lo último que me queda”, aseguró Sergio.

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